Nico Miseria: el niño sensible del rap español

Nico_Miseria_011 (1)

Por Emilia Ruiz de Olano
Fotos: Marina Ventola

Conversamos con el artista establecido en Barcelona sobre la intimidad de su música, el vínculo con la escena argentina y el lugar que ocupan los memes en nuestra generación.

“No me digan tantas cosas lindas que me las voy a creer y me necesitan con la autoestima baja”, dice el músico español nacido en Ciudad Real y criado en Almansa, mientras el público madrileño corea su nombre en la Sala El Sol, un show increíble que dejó las entradas en sold out. Nico Miseria tiene 28 años y cada dos palabras nos habla de lo agradecido que está, mientras pide que lo pellizquen porque aún no puede creer estar viviendo esta vida.

Dos días atrás nos concedía una entrevista en un bar común y corriente en las cercanías de una de las principales estaciones de tren de Madrid, recién llegaba a la ciudad tras haber estado despidiendo “Tercer Verano del Amor” en Valencia. Destaco esto porque es una situación algo inusual: en un género que se sostiene en ostentar el lujo como parámetro de ascenso, Nico se deja ver cansado después de un viaje e integra a su manager en la conversación. Y a esto se le suma algo aún más inusual: en un género sumamente machista, su manager se llama Anna Passek y es nada más ni nada menos que una mujer joven, feminista e integrante de She Shaid So Spain.

Sin dudas, Nico es un artista que se corre de ciertos estándares que rodean a la escena del rap, y que además, pone en crisis varias cuestiones que tienen que ver con un único modelo de masculinidad. Sus letras abordan los vínculos sexoafectivos desde un lugar muy crudo y la perspectiva de clase es la constante que atraviesa todo lo que hace.

Conozcan al artista que antes de ser reconocido como un rapero con nombre propio, ya se las pasaba produciendo para grandes nombres de la escena como Gata Cattana, Soto Asa, Bejo, Dellafuente, Elphomega, Pepe, Cheb Ruben, entre otros.

Fotos: Marina Ventola

¿Cómo fue el proceso de pasar de la producción a abrirte como un artista que ofrece una lírica tan íntima?

Yo siempre escribí, lo que pasa es que a nivel económico y de reconocimiento externo, pues, siempre las producciones tenían mucho más peso, ¿sabes? Entonces digamos que me decanté por ahí porque tenía más salida. Y luego cuando la cosa fue avanzando, y yo ya iba ganando mucha más confianza en mis producciones, había días en los que pensaba: “Joder, si hay alguien que puede hacer un tema escuchable con una producción mía, ¿por qué no intentarlo yo también?”. Al final no tendré el talento que tienen los otros, pero sí que tengo la capacidad de decisión al 100%, ¿sabes? Sobre qué decir y cómo cantarlo. Hay gente que considero que se ha dado a conocer muy bien sin necesidad de salir a dar la cara, siempre desde detrás, produciendo, pero yo nunca he podido. Siempre terminaba queriendo un poco más y me di cuenta que aunque me fastidie, o no fuese lo que más quería, tenía que dar la cara. Y poner la voz, la personalidad… no solo la base y que todo lo demás lo pusiera otra persona.

Y también es muy loco poder repensar qué significa “dar la cara”, sobre todo hoy con el auge de las redes sociales… quizás es dar un concepto y no estrictamente toda tu imagen.

Das la cara pero no tienes que poner toda tu imagen, claro. En mi primer disco sí puse mi cara en la portada, pero para que nadie pudiera oír una de esas canciones sin mirarme a los ojos. Yo como que quise apostar por eso porque es un poco un paso sin retorno, una vez que tú te das a conocer y enseñas tu cara, y la conoce un cierto número de gente, no hay vuelta atrás, ¿sabes? Pero supongo que también hay un tema de ego.

Fotos: Marina Ventola

Hablando de ego y pensando un poco en tu nombre artístico… ¿Por qué Miseria? ¿Piensas que es posible escribir desde un lugar de intimidad sin exponer nuestras propias miserias?

Pues no. Para escribir cosas que lleguen a la gente al final tienes que abrirte un poco, ¿sabes? Y ser capaz de reciclar. Yo siempre soy de reciclar, tanto en la música como en las letras. Me fijo mucho en las conversaciones que tengo, o en las cosas que dicen algunas personas porque después las letras salen de ahí a lo mejor. Y Miseria también es una manera de recordar lo malo, de llevarlo siempre en mi identidad. En algún momento le tuve un poco de asco y me lo quise quitar porque me di cuenta de que me había puesto un nombre muy peyorativo. Pero después con el tiempo me he vuelto a encantar con él, y en la medida que he tenido un poco más de reconocimiento, fui pensando que menos mal que dejé esto aquí, porque me sirve para mantener los pies en la tierra.

Se habló mucho sobre tu último disco desde la perspectiva del amor romántico y los vínculos, pero algo que lo atraviesa muchísimo también es la cuestión de clase…

Sí, el poema de Gata Cattana lo añadí un poco por eso, porque parte de la conexión emocional que se nos da con la gente que nos rodea, tiene que ver con un tema de clases. Cuando sucede algo muy horrible, como una guerra o la última pandemia que nos tocó vivir, quienes salen peor parados, quienes se tienen que apretar el cinturón, hacer un esfuerzo de más para madrugar, siempre son los de más abajo. Nunca la pasan peor los que más capacidad económica tienen, ¿sabes?

Rosario es una de las ciudades con mayor conflicto social de Argentina. ¿Tiene esto algo que ver con que hayas invitado a Varoner a participar de tu último disco?

Mira, yo primero conocí a Brapis y a Irivrte, y fue por medio de “Pedido de captura” que descubrí a Varoner. Y sinceramente yo quería un rollo así, con un rapper argentino, ¿sabes? Pero no quería repetir. No quería hacer una canción ni con RepliK, ni con Mir Nicolás que es muy amigo mío, ni con T&K… y con Varoner me pareció que un movimiento así nos podía beneficiar a los dos por el momento de crecimiento en el que estábamos. Y creo que acerté, porque para mí fue increíble, me descubrió un montón de gente, y creo que a él también le vino muy bien una colabo así de potente y externa.

Fotos: Marina Ventola

¿Y cómo se dió el reciente remix de “Los Celos” con Clara Cava? Que, para ser sinceros, a simple escucha la versión original tiene una intro que suena un poco machista. ¿Hubo una intención en generar una réplica desde otra perspectiva?

Sí, es que eran los celos muy desde mi punto de vista. Y la réplica fue una idea de Anna, porque “Los Celos” es mi tema favorito, pero a la vez es un tema difícil de vender. Entonces este movimiento, que una chica entrara al discurso de los celos, fue una idea que nos atrajo bastante. Y de hecho a Clara yo le propuse otro tema, y ella oyó todo el disco y me dijo que quería hacer el de los celos mejor. Y yo creo que fue por esto, por lo que tú dices, como que ella vio que encajaba perfecto.

¿Con qué otros artistas de Argentina te gustaría colaborar?

No lo quiero decir por si no se da, pero con Argentina siempre he tenido una conexión muy especial. De hecho yo conocí a Mir Nicolás porque él vino a Albacete, y entonces me demostró que la distancia no era tanta, y que de hecho era más grande en mi cabeza que en lo que mide el océano. Y ahí también se dio todo. Cuando sacamos nuestra primera canción, yo en ese momento a lo mejor tenía 200 reproducciones de media, no me escuchaba nadie, y con ese tema de repente subí como a 40.000 o 50.000 plays, pero porque se estaba oyendo en Argentina. Mucha gente incluso cree que soy de allí, y yo nunca he estado en Buenos Aires.

Y también debe ser por lo mucho que te comunicas con memes. ¿Crees que hoy en día también son una herramienta para afrontar las crisis?

Hay momentos en los que me gustaría que mi cuenta fuese solo de memes, o sea, hay días que lo dejo todo.Y también me pasa que los artistas a veces me aburren comunicando las cosas, y por eso el tema de los memes me gusta tanto, porque considero que son la verdadera comunicación de nuestra época. Somos una generación que cuando necesita decir algo y no sabe cómo decirlo, lo comunicamos en base a imágenes súper directas e irónicas. Ahora los memes sirven para decir “te quiero”, “no puedo más con mi situación laboral”, lo que sea, porque hasta tienen fuerza política.

Fotos: Marina Ventola

¿Ya estás trabajando en un próximo disco?

Sí, y lo que te podría decir es que si “Tercer verano del amor” estuvo relacionado a los movimientos sociales, lo que se viene es un viaje, te diría que hasta una aventura.

¿Un renacer?

Sí, y aunque suene un poco egocéntrico, la aventura de volver a hablar de mí. Porque mi primer disco hablaba de mi, pero luego con “Tercer verano del amor” he intentado hacer un disco para la gente, y ahora he decidido que quiero hacer otro disco que sea un poco para mí. Creo que ha llegado el momento.

¿Cómo estás hoy?

Estoy muy contento. Cuando paro y me doy cuenta que estoy viviendo muchas de las cosas con las que soñaba desde los quince años, la verdad es que siento que sigo soñando.

Newsletter de Beba

Newsletter de Beba