Paramore en Argentina: una fiesta nostálgica

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Por Leticia Arieta
Fotografía Esteban Penovi

El barrio de Villa Crespo se llenó el pasado 7 de marzo de pelos de colores y ojos ultra delineados que esperaban el regreso de Paramore a la Argentina. La banda oriunda de Tennessee se presentó en un Movistar Arena casi agotado, con un energético show de dos horas donde repasaron su discografía y su nuevo material: This Is Why.

A las siete de la tarde del siete de marzo pasado, una fila de casi diez cuadras de largo comenzó a movilizarse para entrar al Movistar Arena, el miniestadio ubicado sobre la calle Humboldt. Como es costumbre en Argentina, cada vez que contamos con la presencia de un artista internacional, uno nacional es el encargado de abrir el show, en este caso, los elegidos fueron DARAA: una banda de hard rock al mando de Florencia Alba, una frontwoman igual de imponente que Hayley Williams.

Luego del set argentino, Elke –invitada especial de la gira sudamericana de Paramore–, una cantante neoyorquina de rock alternativo, subió al escenario, bailó y se paseó por toda su extensión y cantó una selección de sus canciones más reconocidas, como: “Milked Dipped Cloud” y “My Sweetheart”, e incluso un cover swing de “Mr. Brightside” de la banda The Killers. El broche de oro de su show fue cuando cerró tomando un sorbo de Fernet que los mismos fans de Paramore le regalaron por su visita al país.

Pasadas las nueve y cuarto de la noche, el público recién terminaba de llenar sus asientos. Hacía ya seis años que Paramore no pisaba Argentina y la tensión comenzaba a sentirse cada vez más. Finalmente, los primeros acordes de “You First” comenzaron a sonar y el público enloqueció, le siguió el clásico “That’s What You Get” y al final, Hayley, la vocalista, preguntó si todos se sentían bien y pidió “thumbs up” para saber si podían seguir tocando, dado que varias personas tuvieron que ser retiradas del campo por desmayos o presión baja.

Recorrieron más clásicos como “Playing God” y “I Caught Myself” para la alegría de los fans más veteranos y luego seguieron con canciones de su repertorio más actual. El corte de su nuevo disco, “The News”, comienza a sonar y en el Movistar Arena se vuelve un sismo al grito de: “¡APAGÁ LAS NOTICIAS!”, sumado a los saltos y el pogo.

Uno de los highlights más importantes de la noche fue “Ain’t it Fun”, cuando entre baile y aplausos, el estadio se convirtió en un coro de gospel donde –como suele ser en los recitales argentinos– el público cantó por su cuenta el puente de la canción. Complacida, la frontwoman halagó a sus fans y preguntó: “¿Ustedes sabían que eran tan buenos cantantes?”

Después de tocar “Caught in the Middle”, la banda dio particulares instrucciones para entrar en su próxima canción “C’est Comme Ça”: “No se atrevan a moverse”. Lo que parece estar convirtiéndose en una divertida tradición comenzó hace pocos días en Chile cuando, por los desmayos en el público, Williams pidió a los fans quedarse completamente quietos “en solidaridad” de aquellos otros fans que se sentían mal. Afortunadamente, después del puente del tema, estuvo permitido volver a bailar otra vez.

La segunda mitad del show estuvo caracterizada por canciones más pop y bailables como “(One of Those) Crazy Girls”, “Still Into You» y “Pool”. Además de la emocionante presentación de “The Only Exception”, donde entre llantos y abrazos, el público se encargó de hacerle coros, mientras agitaban al compás de la canción, las linternas de los teléfonos para darle el toque a la velada.

Llegando al encore, Zac Farro –baterista de la banda– tomó el liderazgo del show para tocar “Scooby’s in the Back”, una canción de HalfNoise, su proyecto solista. Pasó “Hard Times» y llegó uno de los momentos más esperados de la noche: “All I Wanted”. Una canción que, a pesar de tener sus años, jamás había sido tocada regularmente hasta este tour, por la dificultad de sus notas altas. Sin embargo, nadie se atrevió a poner en duda que Williams es totalmente capaz de llegar a estas, convirtiéndola en una de las canciones más increíbles de la noche.

Luego de una breve pausa, llegaron las últimas canciones de la noche y si bien el cierre con “This Is Why» fue energético y perfecto, la canción que todo el mundo esperó –la anteúltima del setlist– fue “Misery Business». Como tradición, la banda siempre elige a algún fan del público para que cante el puente de la canción breakthrough de su carrera, donde esta vez los elegidos fueron Fer, Ailén y Natalia. El primero dijo que era su primera vez en un concierto del grupo –a lo que Williams le respondió: “Bienvenido a la familia de Paramore entonces”–, y las últimas dos fueron elegidas por llevar un simpático cartel, este tenía una foto de 12 años atrás de las amigas, donde escrito se leía que su sueño era subirse juntas a cantar. Ilusionadxs, se subieron y cantaron junto a casi 15 mil personas que también les hacían de hinchada.

Si bien muchos asistieron al show por la nostalgia y ganas de revivir su adolescencia, muchos se llevaron la sorpresa de que, once años después de verlos por primera vez en el Luna Park, la banda mantiene su esencia –quizás se trata de esa energía casi adolescente que tiene Hayley Williams– pero madura junto a su audiencia. Sobre esto, la vocalista agradeció a quienes se quedaron junto a ellos, a pesar de todos los cambios en su música: “Espero que sigamos tocando y envejezcamos todos juntos”.

En resumen: la banda dejó una promesa de volver a visitar el país, recordó su última visita en 2017 –al Personal Fest con el disco After Laughter (2017)– y aseguró que, una vez más, Argentina los había hecho sentir como en su propia casa.

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